Pedro Pradines

Se rompieron los sueños

Tráeme un poco de luz para ver estos ojos

que se quiebran en mis manos .

Sus cercanías me bastan.

Échame  roca en la carne para no abandonar este barco

y caer de tus sollozos hecho polvo

sobre los escombros de la noche.

En mi pecho sólo quiero

el soplo tembloroso de su sangre.

Y deja pasar ese grito

que está partiendo la puerta de dolor.

jordán joel galindo farias

Refugio

El pajarillo buscó descanso

Un lugar para posar sus alas

Más no encontró mejor rama

Que la que ya le habían quebrado

Bajo la luz trémula

Bajo la luz tenue

Le vi buscando un lugar

Donde su alma posar

Una rama de descanso

Su nido ya no era el mismo

Vacío lo encontraba

Le habían quitado el alma

Le habían quitado su rama

Le vi acurrucarse solito

Pobre pajarillo

Lo vi en una esquina

En un rinconcillo

Vi incomprensión en sus ojos

Vi un:-no entiendo.

Vi el alma gris del pobrecillo

Lo vi solo rodeado de silencio

¿Ustedes no lo vieron?

No lo vieron vacilando

Sin encontrar refugio

Sin encontrar respaldo

ESTABA SOLO EL PAJARILLO

Solo solamente con su alma

Con recuerdos

Y preguntas

Con la noche que abrazaba

Si ves un día un pajarillo

Si notas dolor en su mirada

Míralo pues con ternura

Míralo con la mirada

Con la que lo vería una  madre

                                                     Como lo vería su rama

Ximena Gautier Greve

        OLVIDAR   FLORECIENDO.

 

Cuando os digo que no recuerdo

es porque quisiera olvidaros,

deshacer mis pensamientos:

al alba, desde la noche,

estrellados.

Con hambre en el vientre, enfermo,

trinaba el pájaro herido

ensayando con audacia otras lenguas

para trasmitir al día naciente

los amables secretos de la vida,

por las lluvias caudalosas

denigrados.

Lápidas lustrosas algo escondidas iluminan

los pálidos senderos desbocados del rayo

con su preciosa luz húmeda de lodo

bañando en sudor y sangre,

fustigado.

Cuando os digo que no recuerdo

es porque quisiera retroceder de amor

con vosotros en los brazos,

de tarde, sobre los cementerios,

floreciendo.  

luis guillermo saldias roa

VUELO

Cierro los ojos ,vuelo hacia ti

atravesando  arenales,

roqueríos, salares ,ríos,

parcelas ,caminos, calles, escuelas.

Toco el mar

y te siento suave y fresca

como el agua que me acaricia.

Toco las nubes

y te siento transparente

como eres.

Toco la luz

y te veo radiante

como la sonrisa de luna llena

Toco el sol

y siento como

me das su calor

en las noches de pasión

Toco la espuma

y siento la suavidad

del amor de tu corazón

Abro los ojos

y me encuentro aquí solo,

esperando que el tiempo vuele veloz

para estrecharte en un abrazo

en el cual  seamos solo uno tu y yo.

LUIS  SALDIAS ROA  (LUIGUISARO)

RANCAGUA

Silvia Ayala Sandoval.

         En el patio de mi casa

En el patio de mi casa

Se huele a primavera,

Los juncos y las violetas

Y una hermosa enredadera.

En el patio de mi casa

El pasto verde brota,

Y el perro Hugo alegre

Corretea detrás de la pelota.

Me imagino a mi madre,

Al pie de la vieja artesa,

Que en los fríos inviernos

Estruja y refriega la ropa

Con inteligente destreza.

Con sus manos rojas y entumecidas,

Por el agua fría y escarchada,

Con su puntilla de lana al cuello

Y “aquí no pasa nada”.

Al lado de ella,

Debajo del añoso palto,

Mi padre conversa y trabaja

En el banco carpintero

Arreglando su serrucho

Para cortar el madero.

En el patio de mi casa

Se huele a primavera,

Las violetas, calas y juncos

Su perfume en el aire

Nos envuelve a todos juntos;

Hermosa primavera

Que me trae los recuerdos,

Añorando mi niñez

Se me agranda el pensamiento.

Aún quedan en el parrón

Racimos de uva seca,

Que una abeja olvidó,

Algunas hojas amarillas

Que el otoño no llevó.

En el patio de mi casa

Se huele a primavera,

El aroma de sus flores

Durará la vida entera.

         Sidemeras.

ROSA CHAVEZ ALARCON

CON MIL PINCELES

Hoy quiero colorearte

 usare mil pinceles 

y los colores de la vida
para retratarte

 Teñiré un gesto en tus labios 

que me haga sonreír

 en las horas de soledad 

y angustia

Usare una brocha grande

 con cual dibuje unos brazos 

que me ciñan a tu cintura

 y me digan un te amo.

 Voy a elegir una muy suave 

y pintare un corazón
tierno 

que pueda
olvidar los rencores

 y odios

Con otra larga

 trazare dos piernas

 que te encaminen a casa 

para que no olvides que aquí estoy

 para decir que te amo

 Pondré en tus manos

 un ramo de colores 

en bellas flores 

que te acaricien 

cuando yo no pueda hacerlo

No,

no te pintare con pinceles

 te delinearte con mi boca 

pondré los matices del amor

 te amare como una loca

 ROSA  (rochal)
RANCAGUA

ALE AGÜERO ABARCA

Coya otoñal

Mi pueblo…

Sufre una mitosis

Primero por los antaño recuerdos

Segundo por su rápido y alocado

Crecimiento, hacia lo mundano

Mi pueblo…

Aun conserva sus callecitas, desiertas

Por las tardes de otoño

Al igual que las hojas de un árbol

Se desprenden, sutilmente

Danzando, con la sinuosidad del viento

Mi pueblo…

Es una fotografía

Con sus coloridas casas

Rasgadas por el tiempo

Y su gente, humilde  y generosa

Mi pueblo…

Sufre una mitosis

En su entorno natural

El llamado de la tierra

Pide a gritos

No más hidro

No más explotación

A nuestros recursos naturales

No más a empresas inescrupulosas

Mi pueblo…

Al igual que yo

Recibe con los brazos abiertos

A mis amigos y a los amigos de ellos

Soñando, recordando, añorando

A nuestro querido coya otoñal.

HILDA OLIVARES MICHEA

       REFLEXIONANDO

  Cuando creo haber dado

dos pasos hacia delante

la vida me devuelve tres hacia atrás

tropiezos de ser humano; me digo

en pensamientos que aletean en mi mente

pausas de un largo caminar

en ritmo propio

por esta cuerda  floja

que a veces me sostiene

de no caer al vacío

otras se tensa en dirección incorrecta

puede alargar la vida

por rutas ya trazadas

y confieso; no puedo evitarlo

   La vida cambia irónicamente                 

sucesos diarios

me sujeto en combates

que nunca concluyen

y no me detengo

a juzgar las causas

de este ensayo de vivir .