“No importa donde estés, lo
que importa es que estes con tu sello Licakanantay”
Carta para
mi Madre…
Desesperanza
Calama, la fecha que
importa
Solo importan las palabras que quiero escribirte,
solo importa el sentimiento que guardo aquí dentro.
El de echarte de menos madre cuando no te tengo.
La desesperanza de querer estar en nuestro pueblo,
de contarte mis locos secretos, de acariciarte el pelo blanco como la brisa que
siento cuando te pienso y sueño.
Si pudiera tener alas para volar a nuestro San Pedro
de Atacama y decirte suave cito en cualquier momento, patta te quiero…
¡Si ya sé! no es lejos, pero, como esta es una
carta, déjame contarte:
las niñas en el colegio, el “lucho” trabajando,
echando para delante.
Los perros cuidando la casa y yo por otra parte con
mis obligaciones.
Tú sabes, madre sol , que ocupo el tiempo
en soñar y fantasear ¡te acuerdas!
largas conversaciones en las faldas de
nuestro volcán, donde deseaste que fuera grande
¡la más elegante!
Me siento así respaldada por tus frases
Querida…
haciéndome arrurú en tus brazos y amándome.
Hoy te escribo, hoy me acuerdo de nuestros planes
Madre Sol con honores te admiro.
Y como siempre, como todas mis cartas,
sin despedidas, solo el remitente,
te escribe tu hija, simplemente.
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