miércoles, febrero 06, 2013

Beatriz Elena Morales Estrada


Carta de un vagabundo

De un vagabundo que vivió por estos lares
Hay un rumor de voces en la ensenada
De voces que rompen los silencios
De voces que también inauguran la vida
Y se desalojan las palabras
Como viejos epítetos
¡Ay! son estos en su decir alejados y a su vez cercados
Cercados por dulces campaniles que resaltan
En donde por doquier se ocuparon los espacios
Fueron amores en coordenadas
Amores secretos pero a su  vez visibles
¡Ay! cuanto la ame…
Que importa que no se sepa quien fue
Tan solo quiero expresar de nuevo si
Este amor, este amor de vagabundo
Que sale oscilando sentimientos
Se que ella lo sabrá…
Vendrá a su memoria si tan solo nombras
Si tan solo nombras ensenadas y vagabundos
¡A! y se me olvidaba  un arrecife
Si,  un arrecife de besos y abajo una alfombra
Una alfombra de verdes pastizales 
Sobre lagunas de sueños que se enredaban
Se enredaban en las ventanas
Y ahora en la memoria
Cantares…


Gladys López Pianesi


Elegía al caballo


Indómito y bravío fiel estampa de la pampa.
Eco de baguales que repiten las montañas.
Silbido que sopla el viento  entre las cañas.
Fiel  al destino del paisano,  donde acampa.

Amigo de vendavales en la blanca cordillera.
Vientre que has sido arreo y tiro en el arado.
Valiente  gigante  indio, motor  del pasado.
Oído de muchas penas vertidas, sementera.

Caricia de libertad, al rasgueo de una guitarra.
Payada de noche y luna, trotando al destino.
Cacique en la largada de la pista apisonada.



Cuadreras, carreras, jineteadas, doma y parra.
Dos cuerpos que se funden en un sólo camino.
Ganador por  una cabeza. ¡Fue una corazonada!..



Cristina Validakis


LIBRE AMÉRICA…

Fueron los sueños del hombre, los que te hicieron…
Tallada en el silencio del barro  y de la arcilla …
             De la roca, y del agua que fluye
                 Pacífica entre las piedras…
 
Fueron los golpes de tambores,  los que te dieron la voz…
Las tormentas, las corrientes, el canto de los pájaros
El silbido del viento en la espesura,
                           desde la playa azul
                                     hasta la blanca  Cordillera…

Fueron  los colores del cielo,
 Los que pintaron  tu rostro…
             Y te diagramaron… libre  América!!!
Con tu alma emblemática de guerrera
Y tu insobornable legado
                       de certezas y quimeras…
 Tierra indomable… madre profética
Pacífica y sublime
Rebelde y pendenciera…
Te amasaron a golpes, te doblegaron con miedos
Y resurgiste en las cumbres,
                                            Tierra libre… tierra nueva…
Te busco América… y te  imagino en las historias
de los que vivían  … y de los que llegaron…
           abrazando  ambiciones
           y cosechando penas…
Fueron los golpes de tambores, los que reclamaron
Los que se sublevaron…
El canto de los pájaros… y hasta el río…
                 Y hasta las piedras…
                  
Porque eres la Madre toda…
sin dueños…  sin espadas…
sólo pletórica de quimeras…
y porque fueron los sueños del hombre, los que te hicieron
De los que vivían… de los que llegaron…
Desde el verde de la selva,      
Hasta la blanca Cordillera.
                         Y yo te canto, y te dibujo
       Y te proclamo, libre Madre…!!
                  Libre querida América!!!          

                            Cristina Validakis
                       3º Premio Poesía Atina Internacional- Noviembre 2012
 nació en Río Tercero (Cba.) Argenitna, en 1965. Cursó estudios de profesora para la Enseñanza Primaria y de Psicología en la UNC, trabajando en el ámbito académico durante 26 años.
         Recibió numerosos  premios en diferentes Concursos Literarios, nacionales e internacionales  como el Tercer premio en Novela de la Sociedad Cordobesa de Escritores, y finalista en el Certamen ADEPA Perú y diplomas de honor en Mendoza y Bs. As.   

MARÍA ROSA RODRÍGUEZ ARAYA



MARÍA ADRIANA.



Cascabel de baquelita, presente  en el árbol de diciembre,
angelito que protegió mis noches  de infancia aterrada,
columpio vacío, meciéndose, con los remolinos de la pampa,
punto de peregrinación  sagrada de los domingos,
eterno bebé, que agua nuestras miradas.

Dolor punzante,
herida abierta,
ausencia, eternamente llorada.

Espina reinante en nuestros corazones y
en los recuerdos de mi madre ,
que te acuna y te canta todavía,
en sus últimas postrimeras desvariadas.







© LOCUTORA DEL PROGRAMA SEMANAL  RADIAL "TODO PASANDO EN ANTOFAGASTA" EN LA RADIO NUEVO MUNDO 104.7...