Decretos de una huinca
Cae el cielo sobre esta tierra herida
nuestros padres han dejado su huella en la tierra
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su tierra la tuya la mía la nuestra
Cae el cielo dulce y suave
como cada día acariciando tu rostro
invitándote a cesar toda actividad para iniciar otra
Cae el manto de oscuridad sobre tus ojos
para llevarte al descanso en el uno
en el otro, en el todo que te invita a ser
t o t a l i d a d
Sus voces salieron del alma del cultrún de la machi
sus sabias palabras de machi con sus rituales ancestrales
Me llamaron por mi nombre huinca
a través de mi sangre que es su sangre
tu sangre nuestra sangre
nuestra tierra
Me nombraron lamngen y respondí mañumtun
con el rubor en mi cara blanquecina
rodeada de los negros cadejos ancestrales
Siendo todos u n o
me han aceptado y recibido
no cabe en este abrazo la avaricia
codicia del mercenario mercader
que vive para tranzar y
vender
Agua tierra madera oro cobre plata litio …
expender al mejor postor
arrasar las raíces
s u matriz
Y t ú
vas a dejar que arrebaten tu origen tu ceno tu matriz?
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