Fiesta de negros
Lo siento
den nos licencia señores
para cantarle a nuestra tierra.
Dennos licencia señores
para recordar el sufrimiento.
Vientos,
vientos que navegar nos hicieron,
torturas y humillaciones nos dieron,
calma, el abandono del cuerpo,
calma, la mar que recibe al guerrero negro.
Madre,
madre aquí me pariste
viajando en barco del blanco,
con el desconsuelo sobreviviste,
la tierra nunca más vistes.
Tierra,
tierra de negros,
que caminan como siervos.
Pobrezas han conocido,
y con pobreza y discriminación han vivido.
Hechicero,
que conservaste tu cultura
trayendo magia y sabiduría,
sin ser suficiente para cambiar
al embustero de la esclavitud del negrero.
Goudsbloemstraat 129 III voor
1015JL Amsterdam
Nederland
Hermoso poema, emocionante... Un abrazo.
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